La escases de recursos financieros y técnicos, y la posible privatización, son uno de los tantos problemas que enfrenta la educación pública en el país y especialmente en la ciudad de Cúcuta.
Así lo manifestó el secretario de ASINORT, Asociación de Institutores nortesantandereanos, William Henry Velandia quien se refirió a las principales carencias de la educación argumentando en primera estancia, que en el país ya no se paga por el número de maestros sino por el número de estudiantes, es decir, que cada estudiante tiene un precio, si hay 1000 alumnos se pagará por esa cifra más no por la cantidad de docentes contratados, asimismo el ministerio de educación afirma que en Cúcuta no se han cumplido con los compromisos que se adquirieron para la organización de la planta educativa, pues de acuerdo a los parámetros de ley, debe haber un maestro por cada 32 niños y en Cúcuta hay uno por 30,5 estudiantes debido a esto, el ministerio dice que sobran maestros y por tal motivo la nómina que se gira no cubre el total del pago, situación que generó el paro ocurrido el pasado 5 de Noviembre que se extendió hasta el 11 de Noviembre.
El funcionario Velandia también criticó la decisión del ministerio de educación de construir dos megacolegios con todos los elementos técnicos que requiere un proceso de educación de calidad en la ciudad, que atenderá a más de 1440 estudiantes pero con operadores privados, no se pueden incluir docentes públicos porque esa es la condición que le ordena el ministerio al municipio y va en concesión por doce años. “ Cómo se explica que se va a construir dos megacolegios cuando hay más del 70% de las instituciones educativas que tiene problemas de planta física, están en pésimas condiciones, son un riesgo para trabajar ahí” relató Velandia.
En ese sentido, propuso trabajar más en defensa de la educación pública haciendo un llamado a los padres de familia a que envíen a sus hijos a instituciones públicas, así se justificará la planta de docentes y los salarios llegarán suficientes para poder atender a toda la población estudiantil; también exigió una movilización nacional en torno al derecho fundamental de la educación “tenemos que exigirle al Estado recursos amplios y suficientes para la prestación del servicio de la educación como debe ser”. Además pidió la presencia del ministerio, y junto con las autoridades locales desarrollar un foro donde se discuta la situación actual de la ciudad y se busque una solución inmediata a dichos problemas. Todo esto con el fin de garantizar a niños y niñas una educación digna de acuerdo a sus necesidades.
Así lo manifestó el secretario de ASINORT, Asociación de Institutores nortesantandereanos, William Henry Velandia quien se refirió a las principales carencias de la educación argumentando en primera estancia, que en el país ya no se paga por el número de maestros sino por el número de estudiantes, es decir, que cada estudiante tiene un precio, si hay 1000 alumnos se pagará por esa cifra más no por la cantidad de docentes contratados, asimismo el ministerio de educación afirma que en Cúcuta no se han cumplido con los compromisos que se adquirieron para la organización de la planta educativa, pues de acuerdo a los parámetros de ley, debe haber un maestro por cada 32 niños y en Cúcuta hay uno por 30,5 estudiantes debido a esto, el ministerio dice que sobran maestros y por tal motivo la nómina que se gira no cubre el total del pago, situación que generó el paro ocurrido el pasado 5 de Noviembre que se extendió hasta el 11 de Noviembre.
El funcionario Velandia también criticó la decisión del ministerio de educación de construir dos megacolegios con todos los elementos técnicos que requiere un proceso de educación de calidad en la ciudad, que atenderá a más de 1440 estudiantes pero con operadores privados, no se pueden incluir docentes públicos porque esa es la condición que le ordena el ministerio al municipio y va en concesión por doce años. “ Cómo se explica que se va a construir dos megacolegios cuando hay más del 70% de las instituciones educativas que tiene problemas de planta física, están en pésimas condiciones, son un riesgo para trabajar ahí” relató Velandia.
En ese sentido, propuso trabajar más en defensa de la educación pública haciendo un llamado a los padres de familia a que envíen a sus hijos a instituciones públicas, así se justificará la planta de docentes y los salarios llegarán suficientes para poder atender a toda la población estudiantil; también exigió una movilización nacional en torno al derecho fundamental de la educación “tenemos que exigirle al Estado recursos amplios y suficientes para la prestación del servicio de la educación como debe ser”. Además pidió la presencia del ministerio, y junto con las autoridades locales desarrollar un foro donde se discuta la situación actual de la ciudad y se busque una solución inmediata a dichos problemas. Todo esto con el fin de garantizar a niños y niñas una educación digna de acuerdo a sus necesidades.
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